Tanto remordimiento, culpa y migajas de mi desgracia.
Hoy no soy nada.
No, no en tono de mina deprimida.
No, no en tono de victima.
No, no me digas nada, que yo se porque me siento nada.
Quiero abrir y cerrar los ojos al mismo instante que me desvanezco...
No quiero, no puedo.
Nacimos para triunfar o para llorar?
Maldita suerte, maldita sensación y la frustración.